Estamos en verano, y ya sabemos que durante esta época nos resulta difícil perder peso o cuidarnos. Por eso, hoy traemos unos consejitos para disfrutar del verano de manera saludable.
HIDRÁTATE BIEN: Durante el verano, con el calor, nos deshidratamos más. En ocasiones, inconscientemente, intentamos reponer estos líquidos comiendo, ya que la mayoría de alimentos tienen su parte de agua.
Es muy importante beber agua durante todo el día. También es recomendable tomar zumos de frutas naturales, frutas que contengan mucha agua, o tés o limonadas caseras.
REALIZA 5 COMIDAS AL DÍA: Hacer 5 comidas al día, te ayudará a tener controlados los niveles de glucemia o “azúcar “en sangre, y así, evitarás tener “antojos”, y, llegarás con menos hambre a las comidas principales. Además, hacer 5 comidas al día incrementa el gasto energético total del organismo.
Es muy importante hacer medias mañanas y meriendas a base de frutas, lácteos desnatados, algún biscote de pan integral, o fiambre magro, por ejemplo. Así, evitarás alimentos excesivamente calóricos, desprovistos de nutrientes.
HAZ UN BUEN PRIMER PLATO: Hacer un buen primer plato a base de verduras u hortalizas, bajas en calorías y ricas en nutrientes, te ayudará a saciar tu apetito, y a enfrentarte a esos segundos platos más calóricos y apetecibles de una manera más relajada.
Primeros platos saludables que te ayudarán a controlar tu peso son ensaladas, gazpachos, o parrilladas de verduras, por ejemplo.
Segundos platos saludables que te ayudarán a controlar tu peso son pescados, carnes magras, aves, huevos o mariscos.
ELIGE HIDRATOS DE CARBONO SALUDABLES: Según sea el tipo de alimentos ricos en hidratos de carbono que comemos, el hambre aparecerá antes o después, y, el cuerpo transformará la energía que contienen en grasa corporal con mayor o menor facilidad.
Intenta evitar los alimentos con hidratos de carbono de baja calidad como los azúcares o las harinas refinadas no integrales. Elige hidratos de carbono saludables como tubérculos o granos enteros como el arroz integral o las legumbres.
COCINA SANAMENTE: Utilizar técnicas culinarias sencillas y saludables, te ayudará a no aumentar el valor calórico de tus platos innecesariamente y a controlar tu peso.
Elige técnicas como el hervido, plancha, horno, papillote, vapor, brasa, o salteados con poco aceite. Intenta evitar freír, empanar o hacer salsas grasas.
¡CUIDADO CON LOS POSTRES! Los postres demasiado calóricos, como los helados, consumidos a diario, pueden hacer que te encuentres con algunos kilos de más. Debes tener cuidado con ellos y evitar su consumo.
Intenta elegir postres sanos y deliciosos como frutas de temporada, yogures o helados caseros con base de agua o con base de lácteos desnatados.
COMIDAS FUERA DE CASA: Durante el verano, comemos más veces fuera de casa. Es muy importante elegir bien cuando esto ocurra.
Intenta elegir de primer plato una buena ensalada, un buen aliño o verduras a la parrilla, por ejemplo. Los días en los que vayas a tener mayor actividad física, puedes elegir de primer plato un aliño de patatas o un arroz guisado, por ejemplo.
De segundo plato intenta elegir carne, pescado, mariscos, o revueltos cocinados saludablemente.
¡¡¡DISFRUTA DEL VERANO!!!
